MASAJE LIFTING FACIAL JAPONÉS

El masaje lifting facial japonés, conocido como “lifting facial sin cirugía”, se realiza mediante un masaje que estimula la musculatura profunda con el fin de dar tonicidad a la cara, atenuar las arrugas y líneas de expresión y drenar las bolsas.

Historia del Masaje Lifting Facial Japones

El Masaje Lifting Facial Japonés es una técnica de masaje japonés utilizada por los antiguos samuráis para recuperar y mantener el equilibrio físico-mental antes y después de una lucha, a través de una mejor circulación de la energía vital (Qi) en el cuerpo.

El conocimiento de este masaje por años se ha transmitido solamente de maestro a alumno.

En el Masaje Lifting Facial Japonés se combinan conceptos de la medicina tradicional japonesa y de técnicas de masaje que han sido desarrolladas y modificadas durante los últimos 500 años.

“La belleza es un reflejo del equilibrio entre mente, cuerpo y espíritu, y esta se refleja en el rostro”

¿Cómo funciona el Masaje Lifting Facial Japonés?

El Masaje Lifting Facial Japonés se realiza en cara y cuello, y está basado en movimientos rápidos de percusión, amasamiento, arrastres y golpeteos, combinados con manipulaciones suaves y profunda, técnicas de reflexología facial y utilización de puntos tsubos, que permiten el correcto flujo de la energía.

Mediante estos movimientos se tonifican 16 músculos faciales y 24 puntos neurosensoriales entre el cuello y el rostro, se mejora la circulación y el transporte de la linfa, se distribuyen nutrientes, se eliminan toxinas e impurezas, se estimula la creación de colágeno y elastina, responsables de la calidad de la piel. Este masaje, además de cuidar la belleza natural de la piel, relaja el cuerpo y calma la mente aportando un bienestar integral.

De hecho, esta técnica fue concebida, no sólo como un masaje estético, sino también como medio para mantenerse saludables. La belleza es entendida como una apariencia luminosa y jovial pero, al mismo tiempo, de aspecto saludable.

Beneficios del Masaje Lifting Facial Japonés

El resultado es una piel brillante, luminosa y fresca en un rostro sereno y radiante, ya desde la primera sesión. Pero, además, cuenta con los siguientes beneficios:

Aumenta la circulación sanguínea y la oxigenación de la piel, permitiendo a las células de la piel de reparar y rejuvenecer por sí mismas, minimizando el proceso de envejecimiento.
Fortalece y tonifica la musculatura facial, ayudando a corregir y prevenir la flacidez, las líneas de expresión y las arrugas. 
Disminuye problema de acné común y atenúa las manchas.
Incrementa el aporte de nutrientes, sobre todo elastina y colágeno.
Favorece la eliminación de células muertas y toxinas, aumentando la luminosidad y dando un aspecto saludable y juvenil.
Alivia migrañas y dolores de cabeza.
Libera tensión en músculos faciales y de cuello, reduciendo problemas de bruxismo y dolores temporomandibulares.
Crea una sensación de bienestar y despeje mental que actúa positivamente en el estado de ánimo, que se refleja en la piel.

contraindicaciones

No todo el mundo puede recibir un Masaje de Lifting Facial Japonés. Algunas contraindicaciones son absolutas y nunca te permitirán acceder a esta terapia:

Hilo tensor en el rostro.
Botox y acido ialuronico.
Tatuaje de las cejas.
Fractura Ósea Facial
Cirugía Estética Facial reciente.
Peeling Químico.
Quemaduras.
Erupción en la piel por alergia.
Tumores en el óvalo facial.
Acne severo.

Es importante consultar tu terapeuta y, en algunos casos, tu médico antes de reservar una cita.

Recomendaciones

El número de sesiones aconsejadas varía dependiendo del tipo de piel a tratar.

Una persona joven, con pocas arrugas, podría empezar con un tratamiento de 1 vez por semana los primeros dos meses, y un mantenimiento posterior de una sesión cada 15 días. Posteriormente se transformaría en 1 al mes.

Por una persona de mayor edad, en vez, sería recomendable empezar con 2 sesiones semanales durante el primer mes y seguir con un mantenimiento de un tratamiento cada 15 días.

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